El carboximetilcelulosa sódica (CMC) es un compuesto polimérico aniónico, soluble en agua, obtenido a partir de celulosa natural mediante modificación química.
Posee excelentes propiedades espesantes, estabilizantes, retentoras de agua, suspendentes, emulsionantes y formadoras de película, formando una solución coloidal transparente en agua.
La CMC es un material polimérico funcional verde, seguro y biodegradable, ampliamente utilizado en las industrias alimentaria, de productos químicos diarios, farmacéutica, de perforación petrolera y de fabricación de papel.